Me gustaría explicar la importancia para usted de hacer un pacto con Dios y, para que eso acontezca, es necesario que en primer lugar, quiebre el pacto con el Mal. Pues, usted aceptaría compartir su esposa con otro hombre o aceptar a su hijo con algún vicio? Jamas! Pero, infelizmente muchas personas no tienen un pacto con Dios; esto es porque aún alimentan el pacto que hicieron con el Mal, las mañas, las costumbres, las ideas... y todo porque quieren alcanzar sus objetivos y a su manera.
Un pacto exige sangre y entrega. Por lo tanto, para que pueda entrar en un pacto con alguien tendrá que hacer su parte, que es justamente el derramamiento de sangre, el cual representa la vida. Cuando leemos la Biblia, vemos que Dios hizo pactos con Noé, Abraham, Moisés, entre otros, que querían alcanzar sus objetivos, pero que conseguían reconocer sus limites, los cuales no los dejaban alcanzarlos por si solos. Fue entonces, que estos hicieron un pacto con Dios.
Si usted desea alcanzar algo en su vida, si pretende resolver un problema con alguien o consigo mismo(a), y no ha conseguido que hacer; entonces, solo le resta hacer un pacto con Dios.
Recuérdese que antiguamente no existían notarias o contratos firmado, y que para poder hacer un pacto era necesario que ambas partes presentasen un animal; el cual era, enseguida cortado al medio y colocada una mitad para la derecha y otra para la izquierda; después, las personas cambiaban, agarraban el animal que otro había sacrificado y lo colocaban en el fuego, en holocausto diciendo: "Yo tengo un pacto contigo y preciso que se cumpla con su parte, para que yo pueda cumplir con la mía. ahora, si usted no cumple con su parte perderá su vida y lo mismo habrá que acontecer conmigo". Ya en aquella altura, solo la palabra no era suficiente, siendo necesario el pacto.
En el inicio, cuando Jesús vino al mundo el curo, liberó, prosperó, resucitó y aun así; tuvo que hacer un pacto, derramando su sangre. Pero, Él ya hizo su parte, ahora falta usted hacer la suya. Pues, cuando Jesús dijo: "Todas las veces que comieres de este pan y bebieres de este vino, recordad de mi y de mi pacto. Todas las veces que comieres del pan, que representa mi cuerpo que fue entregado por vosotros, y bebieres del vino que representa mi sangre, recordad de la nueva alianza". O sea, para que usted pueda alcanzar los beneficios del Reino de Dios, usted tiene que tener un pacto con ÉL. A fin de cuenta fue para eso que Jesús lo (la) trajo aquí, para que usted haga pacto con Él y para que viva en novedad de vida.
No sé cual es el pacto que usted tenga que quebrar con el Mal, pero fue usted que lo inicio con el mal cuando fumó, mintió, adulteró, se apegó a aquel bien material y por eso se corrompió, más solo usted lo puede quebrar.
La verdad es que Dios no precisa de nada de nosotros, solo apenas de nuestra Fe, pero esa tiene que ser sincera y verdadera. Solo para que eso acontezca, usted tiene que quebrar su pacto con el Mal. !La decisión es suya! Dios los bendiga.
Un pacto exige sangre y entrega. Por lo tanto, para que pueda entrar en un pacto con alguien tendrá que hacer su parte, que es justamente el derramamiento de sangre, el cual representa la vida. Cuando leemos la Biblia, vemos que Dios hizo pactos con Noé, Abraham, Moisés, entre otros, que querían alcanzar sus objetivos, pero que conseguían reconocer sus limites, los cuales no los dejaban alcanzarlos por si solos. Fue entonces, que estos hicieron un pacto con Dios.
Si usted desea alcanzar algo en su vida, si pretende resolver un problema con alguien o consigo mismo(a), y no ha conseguido que hacer; entonces, solo le resta hacer un pacto con Dios.
Recuérdese que antiguamente no existían notarias o contratos firmado, y que para poder hacer un pacto era necesario que ambas partes presentasen un animal; el cual era, enseguida cortado al medio y colocada una mitad para la derecha y otra para la izquierda; después, las personas cambiaban, agarraban el animal que otro había sacrificado y lo colocaban en el fuego, en holocausto diciendo: "Yo tengo un pacto contigo y preciso que se cumpla con su parte, para que yo pueda cumplir con la mía. ahora, si usted no cumple con su parte perderá su vida y lo mismo habrá que acontecer conmigo". Ya en aquella altura, solo la palabra no era suficiente, siendo necesario el pacto.
En el inicio, cuando Jesús vino al mundo el curo, liberó, prosperó, resucitó y aun así; tuvo que hacer un pacto, derramando su sangre. Pero, Él ya hizo su parte, ahora falta usted hacer la suya. Pues, cuando Jesús dijo: "Todas las veces que comieres de este pan y bebieres de este vino, recordad de mi y de mi pacto. Todas las veces que comieres del pan, que representa mi cuerpo que fue entregado por vosotros, y bebieres del vino que representa mi sangre, recordad de la nueva alianza". O sea, para que usted pueda alcanzar los beneficios del Reino de Dios, usted tiene que tener un pacto con ÉL. A fin de cuenta fue para eso que Jesús lo (la) trajo aquí, para que usted haga pacto con Él y para que viva en novedad de vida.
No sé cual es el pacto que usted tenga que quebrar con el Mal, pero fue usted que lo inicio con el mal cuando fumó, mintió, adulteró, se apegó a aquel bien material y por eso se corrompió, más solo usted lo puede quebrar.
La verdad es que Dios no precisa de nada de nosotros, solo apenas de nuestra Fe, pero esa tiene que ser sincera y verdadera. Solo para que eso acontezca, usted tiene que quebrar su pacto con el Mal. !La decisión es suya! Dios los bendiga.
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